17 Jun Charly y las células madre

Charly es un pastor mallorquín bastante joven. Su familia le quiere mucho y no quieren que sufra. Hace años que le operamos los ligamentos cruzados de la rodilla derecha. Se los rompió en un accidente y los reparamos. Aun así ha desarrollado artrosis de rodilla.

Artrosis es una palabra conocida por mucha gente porque las personas también la padecemos. Este término indica que la articulación lleva tiempo inflamada, hasta el punto de que se han producido cambios degenerativos que ya no tienen solución. En estos casos los traumatólogos, tanto veterinarios como médicos tenemos como objetivo aliviar los síntomas asociados:   dolor y disminución de la movilidad de la articulación afectada.

Por suerte, Charly sólo tiene una rodilla afectada. Las otras articulaciones funcionan perfectamente. Sin embargo, sus propietarios observan que cojea con cierta frecuencia.  Ha estado tomando antiinflamatorios y productos que protegen el cartílago de la rodilla durante bastante tiempo, pero Silvia es una propietaria ejemplar que quiere lo mejor para su Charly. De modo que le propusimos terapias biológicas. Son tratamientos que mucha gente no conoce y que ya han llegado a la medicina veterinaria. En Mallorca Veterinarios ya hace años que las aplicamos.

Las células madre

Las células madre se obtienen a partir del tejido adiposo que se somete a una serie de procesos para seleccionar un tipo de célula (mesotelial), capaz de convertirse en células cartilaginosas y, por tanto, reparar la articulación. Las células madre, por lo tanto, son capaces de renovar (al menos de forma parcial) la articulación enferma. Los PrP, también llamados PrGP o factores de crecimiento son unas sustancias que de forma natural forman parte de un tipo de célula sanguínea que quizás conoceréis, las plaquetas. No tienen efecto regenerador, pero pueden desinflamar la articulación durante un período de tiempo medio de 3 meses.

La duración del efecto de las células madre es más largo. En algunos casos dura hasta un año y medio. Ambos tratamientos se pueden poner por separado, pero si se aplican simultáneamente potencian y complementan sus efectos de forma que el efecto es más potente y duradero.

Charly, un campeón

Citamos a Charly para aplicar conjuntamente células madre y PrP. Primero lo sedamos, después preparamos los PrP en la misma clínica y finalmente combinamos los dos tratamientos para ser infiltrados dentro de la articulación de la rodilla. Al cabo de un par de horas  Charly ya pudo irse a casa. Al día siguiente los propietarios aún le notaron alguna molestia en la rodilla infiltrada, pero en dos días ya volvía a ser el de siempre. Esperamos tener el efecto máximo dentro de las próximas 2-4 semanas.

Nuestro objetivo es que Charly no tenga que tomar antiinflamatorios durante una buena temporada y que disfrute de una mejor calidad de vida.