El día que decidimos cambiar de vida estábamos muy nerviosos y una gran cantidad de dudas nos bombardeaban. ¿Cómo será nuestra vida allí? ¿Funcionará? ¿ Nos adaptaremos?.
Guiados por un fuerte presentimiento decidimos embarcarnos en una aventura que nos cambiaría la vida para siempre. Asustados ante lo desconocido, pero con un fuerte convencimiento de seguir nuestra pasión por los animales.
Nunca olvidaremos el verano de 1999, llegamos a Algaida, un pequeño pueblo situado en el corazón de Mallorca, con nuestra mochila llena de ilusiones y proyectos futuros.
Sin embargo, para nosotros es tiempo de brindar la oportunidad a otros veterinarios soñadores como nosotros de vivir esta maravillosa experiencia, y de disfrutar de los incontables regalos que Algaida tiene para ofrecer. Dejar este legado a otros compañeros que quieran recoger el testigo nos parece una bonita manera de cerrar un capítulo para poder abrir otros, porque proyectos e ideas no nos faltan.
Sabemos que por ahí fuera alguien está esperando una oportunidad como ésta y hemos querido darla a conocer para que puedas verla. Espero que seas tú.